Según la ubicación de la biopsia de piel, pueden pedirle que se desvistas y que se coloque una bata limpia. Luego de esto, un médico o una enfermera limpiará el área de la piel donde se realizará la biopsia. Podrán marcar el área con un marcador quirúrgico o con un simple marcador para delimitar el área de la biopsia.
Luego le colocarán anestesia local para insensibilizar el sitio de la biopsia. Generalmente, la anestesia se administra con una inyección de aguja delgada. El anestésico puede provocar una sensación de ardor en la piel durante unos cuantos segundos. Después, el sitio de la biopsia queda insensibilizado y no deberías sentir ningún dolor ni molestia durante la biopsia cutánea.
Lo que puede suceder durante la biopsia de piel dependerá del tipo de biopsia a la que sea sometido:
En una biopsia por raspado, su médico utiliza una herramienta puntiaguda, con cuchilla o bisturí de doble filo para cortar el tejido. La profundidad de la incisión varía de acuerdo con el tipo de biopsia y la parte del cuerpo donde se realiza la biopsia. Una biopsia por raspado causa sangrado. El sangrado se detiene con la aplicación de presión en el área o una combinación de presión y medicamento tópico aplicado en el sitio de la biopsia.
En caso de biopsia por punción o biopsia excisional, será cortada la capa superior de grasa debajo de la piel, por lo que posiblemente sean necesarios puntos para cerrar la herida. Posteriormente, se coloca un apósito o vendaje adhesivo sobre el sitio para proteger la herida y prevenir el sangrado.
Una biopsia de piel tiene una duración aproximada de unos quince minutos en total, incluido el tiempo de preparación, el vendaje de la herida y las instrucciones para la atención en el hogar.
Su médico puede aconsejarte mantener el vendaje sobre el lugar en el que se realizó la biopsia hasta el día siguiente. Por lo general, el lugar de la biopsia sangra después de dejar el consultorio. Esto es más probable en personas que toman anticoagulantes. Si esto ocurre, aplique presión directa a la herida entre diez y veinte minutos. Sin embargo, si el sangrado continúa, informe a su médico.
Todas las biopsias pueden dejar una pequeña cicatriz. A algunas personas se les forma una cicatriz prominente y en relieve. El riesgo de esto aumenta cuando se realiza una biopsia en el cuello o en la parte superior del torso, como la espalda o el pecho. Inicialmente, la cicatriz será rosa y luego cambiará su color a blanco o, a veces, marrón. Las cicatrices se desvanecen gradualmente. El color permanente de la cicatriz será evidente uno o dos años después de la biopsia.
Intente no golpear el lugar de la biopsia ni hacer actividades que pudieran estirar la piel. Esto podría hacer que la herida sangre o agrandar la cicatriz.
La cicatrización de la herida puede tomar varias semanas; sin embargo, suele completarse dentro de los dos meses. Las heridas de las piernas y los pies tienden a sanar más lentamente que aquellas en otras áreas del cuerpo.
El lugar de la biopsia requiere de ciertos cuidados mientras cicatriza. Estos cuidados incluyen:
Lavarse las manos con agua y jabón antes de tocar el lugar de la biopsia.
Lavar el lugar de la biopsia con agua y jabón. Si se encuentra en el cuero cabelludo, utilice champú.
Enjuagar bien el lugar.
Secar el lugar con golpecitos con una toalla limpia.
Cubrir el lugar con un vendaje adhesivo que permita que la piel se ventile. Continúe cuidando el lugar de la biopsia hasta que se extraigan los puntos. En el caso de las biopsias por afeitado que no requieren puntos, continúe cuidando la herida hasta que la piel cicatrice.
Biopsia - médula ósea.
Por lo general no se necesita ningún tipo de preparación especial. Sin embargo, existen ciertas recomendaciones que pueden seguirse:
Informe a su médico si se encuentra tomando algún medicamento o suplemento.
Si es alérgico a algún medicamento.
Si presenta problemas de sangrado.
Si está embarazada.
Es una prueba solicitada en caso de que se presenten las siguientes anormalidades:
Anemia de causa desconocida.
Leucopenia.
Trombocitopenia.
Aplasia medular.
Leucemia.
Linfoma.
Mieloma múltiple.
Mielofibrosis.
Policitemia vera.
Infecciones.
Amiloidosis.
Indicios de cáncer de los glóbulos blancos llamado macroglobulinemia de Waldenström
Es una prueba que consiste en la extracción de una muestra de la médula ósea para analizarla. Este examen permite la detección de enfermedades o trastornos que involucre la médula ósea o los glóbulos sanguíneos, determinar el grado o el avance de una enfermedad, controlar los niveles de hierro y el metabolismo e identificar las causas de una fiebre de origen desconocido.
En primer lugar, su médico evaluara si es necesario o no realizar un procedimiento de biopsia de médula.
Una biopsia de médula ósea se realiza en el consultorio de una clínica o en un hospital. La muestra de médula puede ser tomada de la pelvis o del esternón, aunque en algunas ocasiones puede ser tomada de otra área.
La médula se extrae en los siguientes pasos:
En caso de que se encuentre muy tenso o nervioso, puede administrársele un medicamento para ayudarlo a que se relaje.
Se limpiará la piel e inyectará un anestésico dentro del área y la superficie del hueso.
Seguidamente se introducirá una aguja para biopsia en el hueso. El centro de la aguja se retirará y la aguja hueca se introducirá con más profundidad dentro del hueso. Esto captura una pequeña muestra, o núcleo, de médula ósea dentro de la aguja.
Finalmente se retiran la aguja y la muestra y se aplica presión y luego un vendaje a la piel.
Asimismo, se puede hacer una aspiración de médula ósea, usualmente antes de tomar la biopsia. Luego de anestesiar la piel, se introducirá la aguja dentro del hueso, y se utiliza una jeringa para extraer la médula ósea líquida. Si esto se hace, se retira la aguja y se reposiciona. O se puede utilizar otra aguja para la biopsia.